Marlo Morgan relata en esta obra una odisea fascinante: un viaje a pie por el desierto australiano en compañña de una tribu de aborígenes cuyas leyes de convivencia nada tienen en común con las occidentales. El aprendizaje es duro, pues a lo largo de esta extraña peregrinación, la autora tiene que desprenderse de sus antiguos hábitos para poder gozar al fin de una auténtica comunicación con la naturaleza. Al coraje que demuestra afrontando las penalidades del viaje, se sumó luego el esfuerzo de resumir las vivencias en esta obra inspirada e espiritual.