Bolívar solo ha visto la nieve desde el avión que le trajo a España al dejar atrás su país, Ecuador. Y cuando se le presenta la oportunidad de hacer un curso de esquí, no lo duda; lo de menos es que no tenga el equipo adecuado. En la nieve espera olvidar por unos días el callejón asfixiante en el que se ha convertido su vida: la casa compartida con demasiados compatriotas y, sobre todo, la amenaza del hombre que se ha casado con su madre. Pero los compañeros del curso son como de otro mundo, y a menudo ni siquiera entiende lo que dicen. Aunque tienen en común más de lo que parece, como todos acaban descubriendo. Aislados en la montaña y obligados a compartir espacio y actividades, los conflictos que arrastran los protagonistas salen a la luz: las dificultades para integrarse del inmigrante, la delicada situación familiar que oculta el triunfador y las derrotas y los complejos del perdedor. Inevitablemente chocan, pero cuando sus historias se cruzan, a pesar de todo aquello que los separa, surge una alianza amistosa que los hace más fuertes y les da confianza en el futuro.