u003cpu003ePocos intrusos tenían acceso a las juergas indecentes que los miembros del Ejército Celestial llevaban a cabo en el más absoluto secreto. En el seno de esa sociedad secreta, numerosos aristócratas ingleses exiliados se reunían para dar rienda suelta a sus deseos carnales, pero pocos podían competir con el insaciable apetito de su provocador anfitrión, el misterioso vizconde Rohan.u003c/pu003e u003cpu003eY es que para el vizconde, la búsqueda del placer físico no era sólo su pasatiempo favorito, sino una apremiante necesidad, hasta que en su camino se cruzó una mujer fascinante que no se dejaba amedrentar. La virginal y empobrecida Elinor Harriman encontraba espantoso el oscuro ejercicio de seducción del vizconde, al mismo tiempo que intrigante... y en secreto se sentía atraída por el hombre que se ocultaba detrás de la máscara del deseo. u003c/pu003e